Usted estimado lector, deberia estar durmiendo placidamente o cuando menos se prepara para otro tortuoso dia de batalla con el Transantiago. Sin embargo, son casi las 4 y media de la madrugada y leo con asombro una noticia en el portal Radioeme.cl que en algun momento me atreví a vaticinar y que sin embargo me valió una serie de improperios a la distancia de parte de Gerardo Nuñez, Gerente General de Radio La Carmelita. Asi y todo, no pense que me llenaria de asombro leer dicha nota: Radio La Carmelita tendria sus dias contados...
Y es que el descenlace no podia ser de otra manera. Objetivamente hablando, con la cabeza fria y libre de todo resentimiento (y el espiritu tambien), la radio estuvo yendo de mal en peor en todos los aspectos. Desde la parte tecnica (aun no se como SUBTEL no descubrio que la antena de la emisora estaba en lo mas alto del Santuario Nacional de Maipú, cosa que se ve a simple vista desde las calles colindantes al Templo Votivo), pasando por una línea programatica y musical indefinida e incoherente (ninguna radio de Iglesia que se precie de tal incluiria un genero como el Reggaeton aunque sea en los bailables), hasta las relaciones humanas al interior de dicha radio (ya he dicho cosas al respecto en cronicas anteriores y son de conocimiento público, asi que no hay necesidad de repetirlas).
Pero si a eso le sumamos que el concurso respectivo que llamó SUBTEL por la renovación de la frecuencia tuvo como unico postulante la sociedad Alimentación y Servicios Rosales Ltda., una de las razones sociales del dueño de la cadena evangelica Alas de Aguila a nivel nacional y de Radio Estación 4 en las comunas de Maipú y Cartagena, quien escribe esta crónica escuchó hace no más de 2 meses atrás de labios del propio Nuñez en los microfonos de La Carmelita su intención de abrir una radio de similares caracteristicas en las cercanias de Ninhue, Región del Bio-Bio, en sociedad con Luis Arevalo, conocido radiodifusor de vasta trayectoria. Y como si fuera poco, se rumoreaba (nunca se confirmó o desmintió esta información) que las relaciones entre Nuñez y el Templo Votivo no estaban en buen pie que digamos. En definitiva, el horno hacia rato que no estaba para bollos.
Pero no todo puede ser tan malo. Por sus microfonos han pasado grandes valores de la radiodifusión comunal (La lista es tan larga que si la nombro mas de alguien puede quedar fuera asi que no daré los nombres) que tal vez no han sabido ser bien aprovechados, pero que que tuvo buenos y valiosos recursos humanos, los tuvo, indudablemente.
No se puede negar que el, tal vez, único merito de Nuñez. Fue capaz de conseguir por si solo, sin el apoyo de nadie al comienzo, la tan anhelada frecuencia para una institución tan querida y respetada por los maipucinos como es el Santario Nacional de Maipú. El problema es que, si bien la idea fue buena, desgraciadamente terminó siendo más de lo mismo, y en radio eso se paga caro. Pudo haber tenido las ganas y el empeño por entregar una radio digna del Templo, pero absorbio tantas funciones que no se dió cuenta de que el proyecto se le estaba yendo de las manos, enceguecido por su orgullo propio.
Señor Nuñez, antes que piense en mandarme a cierta parte y decirme unos cuantos garabatos con su conocido complejo de "patron de fundo", o en el mas extremo de los casos, desee demandarme a la Justicia (porque se que tiene soplones que leen este blog), sepa que no tengo nada en contra de la radio, ni en contra suya. Pero lo que Emilio Freixas no puede perdonarle 2 años despues de mi despido de la radio por su parte, es que haya trapeado el piso con mi honra personal y la de mi familia, eso no se lo aguanto a nadie. Si a usted le pareció una campaña de persecucion de mi parte, alla usted, pero como auténtico hombre de radio, así como se reconocer lo bueno, también debo denunciar lo que no lo es, y de manera responsable. Y si veo que las cosas en la radio La Carmelita, o la que sea el dia de mañana, no estan funcionando, es mi deber etico y profesional mostrarlas, no esconderlas. Las verdades duelen señor Nuñez, que a usted no le gusten que se las digan es su problema, no el mio.
Lo concreto es que, le guste a quien le guste, La Carmelita bajará el telon este 2007, y si no me creen, es cosa que chequeen www.subtel.cl, seccion concursos. Desengañense ustedes mismos.
¿Que deparará el futuro radial en Maipú? no lo sé, pero que Dios nos pille confesados.
Y es que el descenlace no podia ser de otra manera. Objetivamente hablando, con la cabeza fria y libre de todo resentimiento (y el espiritu tambien), la radio estuvo yendo de mal en peor en todos los aspectos. Desde la parte tecnica (aun no se como SUBTEL no descubrio que la antena de la emisora estaba en lo mas alto del Santuario Nacional de Maipú, cosa que se ve a simple vista desde las calles colindantes al Templo Votivo), pasando por una línea programatica y musical indefinida e incoherente (ninguna radio de Iglesia que se precie de tal incluiria un genero como el Reggaeton aunque sea en los bailables), hasta las relaciones humanas al interior de dicha radio (ya he dicho cosas al respecto en cronicas anteriores y son de conocimiento público, asi que no hay necesidad de repetirlas).
Pero si a eso le sumamos que el concurso respectivo que llamó SUBTEL por la renovación de la frecuencia tuvo como unico postulante la sociedad Alimentación y Servicios Rosales Ltda., una de las razones sociales del dueño de la cadena evangelica Alas de Aguila a nivel nacional y de Radio Estación 4 en las comunas de Maipú y Cartagena, quien escribe esta crónica escuchó hace no más de 2 meses atrás de labios del propio Nuñez en los microfonos de La Carmelita su intención de abrir una radio de similares caracteristicas en las cercanias de Ninhue, Región del Bio-Bio, en sociedad con Luis Arevalo, conocido radiodifusor de vasta trayectoria. Y como si fuera poco, se rumoreaba (nunca se confirmó o desmintió esta información) que las relaciones entre Nuñez y el Templo Votivo no estaban en buen pie que digamos. En definitiva, el horno hacia rato que no estaba para bollos.
Pero no todo puede ser tan malo. Por sus microfonos han pasado grandes valores de la radiodifusión comunal (La lista es tan larga que si la nombro mas de alguien puede quedar fuera asi que no daré los nombres) que tal vez no han sabido ser bien aprovechados, pero que que tuvo buenos y valiosos recursos humanos, los tuvo, indudablemente.
No se puede negar que el, tal vez, único merito de Nuñez. Fue capaz de conseguir por si solo, sin el apoyo de nadie al comienzo, la tan anhelada frecuencia para una institución tan querida y respetada por los maipucinos como es el Santario Nacional de Maipú. El problema es que, si bien la idea fue buena, desgraciadamente terminó siendo más de lo mismo, y en radio eso se paga caro. Pudo haber tenido las ganas y el empeño por entregar una radio digna del Templo, pero absorbio tantas funciones que no se dió cuenta de que el proyecto se le estaba yendo de las manos, enceguecido por su orgullo propio.
Señor Nuñez, antes que piense en mandarme a cierta parte y decirme unos cuantos garabatos con su conocido complejo de "patron de fundo", o en el mas extremo de los casos, desee demandarme a la Justicia (porque se que tiene soplones que leen este blog), sepa que no tengo nada en contra de la radio, ni en contra suya. Pero lo que Emilio Freixas no puede perdonarle 2 años despues de mi despido de la radio por su parte, es que haya trapeado el piso con mi honra personal y la de mi familia, eso no se lo aguanto a nadie. Si a usted le pareció una campaña de persecucion de mi parte, alla usted, pero como auténtico hombre de radio, así como se reconocer lo bueno, también debo denunciar lo que no lo es, y de manera responsable. Y si veo que las cosas en la radio La Carmelita, o la que sea el dia de mañana, no estan funcionando, es mi deber etico y profesional mostrarlas, no esconderlas. Las verdades duelen señor Nuñez, que a usted no le gusten que se las digan es su problema, no el mio.
Lo concreto es que, le guste a quien le guste, La Carmelita bajará el telon este 2007, y si no me creen, es cosa que chequeen www.subtel.cl, seccion concursos. Desengañense ustedes mismos.
¿Que deparará el futuro radial en Maipú? no lo sé, pero que Dios nos pille confesados.
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