Leía en un portal scout (que no es por cierto el portal oficial de Guias y Scouts de Chile) un pensamiento relacionado con, tal vez, el capital más preciado por los verdaderos scouts: el honor.A veces me pregunto si junto con haber hipotecado ciertos dirigentes el patrimonio financiero del movimiento Guía y Scout, hipotecaron también el honor. Que yo recuerde, los Scouts siempre hemos sido objeto de burla y de incomprensión de un cierto sector de la sociedad, de los cuales siempre hemos salido airosos como institución, sin embargo hoy en día por culpa de “algunos”, hasta fama de pedófilos hemos adquirido los Scouts y eso duele mucho.
¿Cómo es posible que una institución que está próxima a cumplir 100 años en el país esté donde se encuentra en este momento? Porque lamentablemente los que llevamos el escultismo en el corazón somos los que estamos pagando los platos rotos, las deudas siguen existiendo, las diferencias son cada vez mas notorias, en algunos casos irreconciliables, la imagen está por los suelos, y la motivación para encantar a nuevos Scouts pende de un hilo…
Los Scouts no solo empeñamos la palabra a través de la Promesa, sino que también el Honor, pero hoy en día, ¿existe alguna diferencia entre un Scout y alguien que no lo es? Solo el uniforme. Del resto, poco o nada queda.
Si queremos sortear este obstáculo como muchos otros que como movimiento hemos sorteado, debemos olvidar todo tipo de diferencias, dejarnos de ambigüedades respecto al método empleado en el papel, mal que mal todos sabemos que el verdadero escultismo no necesita manuales, necesita accion, y empeñarnos en recuperar la credibilidad perdida ante la sociedad… si como movimiento no nos hemos cuestionado, creo firmemente que ha llegado el momento de hacerlo… nuestro honor esta en juego.
1 comentario:
Emlio... leyendo tu post veo con tristeza que no solo en mi grupo scout hemos tenido problemas... a principio de año nos toco destituir al antiguo "jefe" de grupo por ladron, lo denunciamos y, aunque se perdio la plata, se depuro un poco el movimiento. Esto me dio a pensar mucho, pero hoy estoy mas orgulloso que nunca de los scouts, y en particular de mi grupo. Tenemos un grupo en el que se valora el honor, la honorabilidad, se da todo de si por cumplir la ley y por estar acorde con la promesa, esto de parte de todos los lobatos, los scouts, los rovers y los dirigentes. Hay problemas, pero es de un scout sonreir y cantar en las dificultades, y trabajar por superar estos problemas y volver a los origenes del escultismo, donde los scouts nos diferenciamos del "resto" por nuestro honor y por nuestra exelencia.
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