El Martes 6 de Diciembre quedará escrito en los anales de la radiodifusión comunal como el regreso del malogrado "martes negro". El día en que una vez más los poderes fácticos del gremio radiodifusor se organizaron para silenciar una legítima forma de hacer radio: hablo de las radios comunitarias.Ese día, a partir de una querella presentada por la Asociación de Radiodifusores de Chile (ARCHI) en contra de las "radios ilegales", el fiscal de Santiago Poniente, junto con la fuerza pública, lease el OS-9 y el GOPE de Carabineros de Chile procedieron a clausurar las emisiones y dependencias de la mítica Radio Maipú FM.
La verdad es que es una situación sumamente compleja, porque si bien es cierto que Maipú FM hace ya bastante tiempo que estaba transmitiendo de manera clandestina, y al mismo tiempo la frecuencia 104.5 tiene otro concesionario (Comunicaciones de la Costa), la pregunta que se hace todo Maipú es: ¿era necesario el uso de tanta fuerza policial? ¿Se buscaba clausurar una radio clandestina o se perseguian delincuentes, terroristas tal vez? ¿Era tanta la necesidad imperiosa de apresar gente que llegaron a hallanar por error las dependencias de Radio Estacion Cuatro a tan solo pasos de los estudios de Maipu FM?
Hay que hacer mención que ARCHI esta llevando a cabo de manera sistematica una campaña del terror contra las radios comunales en general. Está más que demostrado que para ellos, los medios comunales son nicho de delincuentes, y lo que es peor, ahora que recuerdo un tal sr. Nuñez que se autodenomina Gerente General de Radio La Carmelita (emisora comunal ligada al Santuario Nacional de Maipú) decía exactamente lo mismo una vez: "todos los que trabajan en las otras radios comunales son delincuentes". Me pregunto si no se habrá visto al espejo antes de cometer tamaña afirmación.
Lo mismo corre para los señores de ARCHI. El espectro radioelectrico en todo el mundo es de libre acceso, esta bien que sea regulado por la SUBTEL, pero por favor, si hablamos de ilegalidades, ustedes son los primeros en tener tejado de vidrio. ¿O no les parece extraño pedir una prorroga de 10 años mas de manera turbia cuando sus concesiones de 25 años estan por vencer? ¿No les parece extraño transmitir con 30 mil watts de potencia cuando la potencia máxima permitida es 10 mil?
Y que hay de intereses tan mezquinos como la negativa a repartir la torta publicitaria. A las grandes multitiendas les interesará invertir en publicidad en una radio comunal. No. ¿y saben por que? por una cuestión de imagen. Desgraciadamente la importante labor de las radios comunales en Chile se ve empañada por un serio prejuicio: estas siguen siendo vistas como medios de segunda o tercera categoria. Y el Estado es cómplice activo de este ambiente enrarecido. Porque la Ley vigente no se adecúa a los tiempos que corren. Es practicamente IMPOSIBLE realizar a cabalidad un buen proyecto radiodifusor en un plazo de 3 años, con 1 Watt maximo de potencia, la antena a 6 metros de altura y sin posibilidad de pasar publicidad con el único propósito de autofinanciarse, que no es lo mismo que LUCRARSE. El mismo ejemplo a la inversa: ¿a un almacen de barrio le interesará publicitar en una cadena satelital? Tampoco. Porque no solo los precios son elevadisimos por los 30 segundos de publicidad, sino que ademas no llega al publico que le interesa llegar... por lo tanto es plata perdida.
Es por ello que muchas radios mueren en el camino y sirven de paso como caldo de cultivo para la proliferacion de radios evangelicas. Lo peor de todo es que son 300.000 pesos perdidos para presentar un proyecto que en el fondo esta sujeto a una verdadera loteria. Y esa es plata que los organismos comunitarios NO TIENEN, y por lo tanto deben hacer malabares para juntarla.
La pregunta final es ¿cuantos martes negros necesitamos para que en Chile haya una Ley decente que proteja a las radios comunales? Ojala que no sea demasiado tarde para cuando se concrete... no queremos que le pase a la FM lo que esta viviendo actualmente la AM...
Viva la radio!
